Sociedad | Urbano Mazzey, 30 años al servicio de Bomberos Voluntarios de Laprida

En 1884 se fundó el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de La Boca. En el país hay 40 mil. Historias en primera persona.

Hoy se celebra en todo el país el Día Nacional del Bombero Voluntario en honor al aniversario de la creación del primer cuerpo de Argentina. Bajo el lema "querer es poder", el 2 de junio de 1884 se fundó el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de La Boca. El suceso tuvo lugar gracias a la iniciativa de Tomás Liberti, quien creó el cuartel a pocos días de que su hijo Orestes comandara espontáneamente a un grupo de vecinos para apagar un voraz incendio al grito de "¡Adelante los que se animen, vamos a apagar el incendio!".

Laprida Noticias fue a buscar a Urbano Mazzey, quién fue 5 años cadete (1992 a 1997) para luego jurar como Bombero Voluntario de nuestra ciudad, y dedico 30 años de su vida a servir a nuestra sociedad.

Hace apenas 6 meses se retiro del Cuerpo Activo como Segundo Jefe, para pasar al Cuerpo de Reserva.

Jueves al medio día, apenas unos minutos pasados de las 13 horas, y nuestro periodista se dio cita en el cuartel de Bomberos Voluntarios de nuestra ciudad, lugar que eligió nuestro entrevistado, su segunda casa.

El lugar elegido para la entrevista, el sitio donde se cambian cada vez que hay una emergencia, con placares a los costados se observa los sacos, botas, cascos, pantalones. Todos con un numero diferente y el nombre de cada bombero. Urbano nos muestra su placar vacío, donde hay una inscripción que dice Mazzey, ya sin su uniforme.

-¿Cómo fue para ingresar al cuartel de bomberos? ¿Por qué ingresas?

“Bueno, esto como todo chico, mi papá era bombero, entonces yo venía al cuartel siempre y venir al cuartel y sentarse en los camiones era fantástico y lo sigue siendo pero en ese momento eran más lindos todavía” con ojos brillantes, contento y un tanto emocionado continua Urbano  “y entonces bueno entre con un grupo de bomberos deciden abrir la escuela de cadete, así que fuimos los primeros en ingresar a la escuela de cadete que el nombre de la escuela era Carlos Mozzi, por el primer jefe que tuvo el cuerpo activo de bombero de Laprida. Yo tenía 14 años cuando ingresé de cadete, juré a los 19 años como bombero”

-¿Te acordás cómo fue esa primera salida a los 19 años? Porque cadete iba también a apagar fuego, ¿verdad?

No! Como cadetes solo salíamos a los actos y a la escuela a algunas reuniones, pero no, justo en ese año hubo una tragedia muy grande en Puerto Madryn, donde murieron muchos aspirantes entonces de esa vez se cortó toda la salida. Antes salían los aspirantes a apagar fuego, desde aquella tragedia ya no podíamos salir más. Murieron cadetes en un incendio de campo, entonces de ahí cortaron la salida.

-¿Y qué hacían los cadetes de nuestra ciudad en ese entonces, tenían academia como los martes?

Claro, nosotros íbamos a academia los sábados, veníamos los sábados, hacíamos instrucción, disciplina, orden, limpiamos las unidades. Cuando había una emergencia no podíamos venir. Aunque uno venía después a mirar, a ayudar a limpiar, a escuchar lo que los bomberos hablaban, que era una magia, porque uno se vestía como bombero, pero no podía salir entonces tenemos la ropa que eran pantalones y camisa marrón y botas negras. Ese era nuestro equipo que lo usábamos todos los sábados en instrucción”

 -Y a los 19 años, cómo fue cuando tomastes juramento como bombero y el primer accidente. ¿te acordás?

 Sí. Nosotros juramos un 6 de junio de 1997 y a los tres días hubo la primera salida nuestra que fue un incendio de banquina, fue algo hermoso y al tempito me tocó un accidente con un fallecido, cerquita de San Jorge que fue con los chicos nuevos y yo éramos el primer accidente con una persona fallecida. Siempre te marca algo, cada salida es diferente… No son todas iguales, son todas diferentes, pero siempre la primera queda marcada.

-¿Quiénes fueron esos bomberos que egresaron como cadetes con vos, y tomaron juramente como bombero?  

Los que juramos, estamos los cuatro. Juró Cristian “Tato” Mendía (2do jefe en la actualidad), Diego Agüero y Germán Sanga. Diego Agüero entró y se fue al tiempito y volvió a entrar a reingresar de vuelta, y Germán Sanga también, entonces a ellos le falta un poquito más para cumplir 25 años, Cristian lo cumplió también igual que yo hace poco, en junio del año pasado.

-Contame cómo fue ir a un accidente grande, te ha tocado seguramente un accidente grande, bueno dirigiste solamente con una persona fallecida, pero ¿habrá habido algún accidente de esos que no nos gusta a nadie y seguramente a vos tampoco?

Sí, hemos tenido intervenciones con múltiples personas fallecidas hemos tenido. Uno se prepara, yo siempre digo que uno se prepara para lo peor, cuando uno estudia, practica, practica lo más difícil cuando después en la vida real sea un poco más suave y por ahí se asemeja a la práctica. Son situaciones que son buenas como experiencia, pero no es lindo la pérdida de bienes, no es lindo. Aunque para nosotros los bomberos nos gusta tener acción, pero no estamos deseando que haya una salida porque una salida nuestra es una mala noticia, para el que está viviendo por familiar o pérdida de bienes, o de vida, entonces paro nosotros nos queda esa impronta de decir bueno si hay una emergencia quiero estar, no estamos deseando que la haya, pero cuando suena sirena todos ponemos lo mejor y que salga perfecto.

-¿Qué es lo que dijo tu papá cuando dijiste yo quiero meterme como cadete y quiero ser bombero como vos?

Y bueno mi viejo… Yo soy hijo único, mi viejo estaba muy muy contento, el tema era mi madre, como yo le decía a mi vieja que quería ser bombero. Ella aceptó. Ingresé con 14 años y bueno un orgullo. El día que yo juré mi papá me dio el diploma de bombero (foto).

-¿Fue jefe de bombero tuyo tu papá?

No, mi papá se había retirado porque estaba enfermo, se había retirado pero ese día él fue el que me dio el diploma que me acreditaba como bombero voluntario, que la foto la tengo guardada a pleno siempre.

-¿Quién fue por ahí, lo que más te costó en esos años de cadete y que vos te esmerabas para tratar de superarlo y de meterle para adelante y decir lo tengo que superar, lo tengo que superar para cuando jure como bombero?

Vos sabes que en realidad no, o sea no es que soy un super hombre o somos, no no, al contrario fuimos un grupo muy unido y somos unidos, pero entre nosotros, entre los mismos compañeros, estamos todo el día juntos mirando las autobombas porque no podemos salir pero si íbamos a echar nafta con el chofer y salíamos a echar nafta o echar gasoil, e íbamos con los camiones 14, 15 años y 16 años andando en un camión de bombero en esa época era algo único, que ese amor por cuestión de la vida a nivel social se ha perdido eso en todo ámbito de la vida, no solamente acá, entonces fue un grupo que siempre los cinco, los seis, los siete u ocho estamos siempre unidos tratando de no tener miedo, aunque el miedo es bueno porque hay que tener un poco de miedo, pero no, lo sacamos todos los miedos para poder afrontar el día de mañana y así fue. Así fue que dé a poquito fuimos tomando fortaleza y escuchamos los bomberos viejos cuando hablaban. Entonces, esa fue la mejor instrucción, fueron los bomberos viejos, que cuando venían a tomar mate, hablaban del accidente, hablaban del incendio y uno tomaba todo.

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-¿Tuviste en algún momento de estos 30 años como bombero, algún momento, donde estuviese entre la vida y la muerte?

Si. Una vuelta fuimos a un incendio que hace muchísimo, no sé, perdí la noción, pero debe hacer 20 o 22 años, fue una casa donde en el fondo del patio vendían garrafas y bueno fuimos y justo explotan unas garrafas cuando nosotros estamos ingresando a la vivienda.

-¿Volaste? ¿Te caíste?

No, no. Se escuchó la explosión terrible, y nosotros estábamos cerquita del galpón y bueno, cuando fuimos, había explotado hacía un ratito, se sintió la explosión. En otras casas también, en otras casas hemos estado donde ha explotado alguna vivienda también, hace 10 o 12 años también, estábamos por ingresar y en el umbral de la puerta, ahí explotó la garrafa y el bombero que estaba delante mío se agacha o la misma onda expansiva lo hace agachar, cuestión que también otro terrible susto y después bueno esos son un susto que nos da la emergencia, pero después complicado en un accidente de noche en la ruta y estamos en la ruta trabajando y la gente no para no ni aminora la marcha, entonces también te sentís con miedo porque estás logrando escuchar que vienen los camiones y pasan atrás tuyo ahí a un metro también, pero relativamente emergencia si un par de veces con las garrafas hemos tenido.

-Has salido a prestar también colaboraciones, digamos, como a Sierra la Ventana, por ahí cuando ha habido incendios forestales ¿Has ido a alguna otra ciudad donde hayan precisado, de asistencia, colaboración?

 Sí, nosotros fuimos en el 2009 al Delta, a Zarate, a las Islas Taravera. Ahí también fuimos de acá de Laprida, fuimos cuatro bomberos, fuimos de toda la región sur, que nos encontramos en… No me acuerdo si era en Chivicoy, ahí veníamos en toda la unidad y fuimos en caravana hasta Zarate, y ahí estuvimos dos días trabajando. Hemos ido al vivero de Claromeco, y después, casi todos los años en verano prestamos servicio en Sierra de la Ventana con los incendios forestales, eso es muy normal, los meses de verano con incendios, es muy normal ir a Ventana y bueno, también hemos tenido incendios que hemos compartido con La Madrid, con Olavarría, con Pringles, con Juárez también hemos trabajado juntos.

-¿En qué te especializabas vos?

Bueno, yo en el cuartel hice mucho, pero yo fui, o sea, soy instructor, hice el curso de instructor y el curso de ética que, en el año 2019, fui elegido como subdirector de ética de la región sur, así que tuve un periodo de dos años y medio, porque con la pandemia se extendió seis meses más, pero siempre son dos años el periodo que estuve como subdirector de ética de la región sur.

 -Cómo es la vida un día acá en bomberos, en el cuartel cómo es la hermandad la convivencia?

Yo siempre digo que es como mi segunda casa, es nuestra familia que en nuestra familia también tenemos diferentes formas de pensar, con un esposo, con una mujer, con los hijos esto es una casa grande donde somos 38 o 39 personas que estamos por un bien común, pero que cada cual tiene una creencia diferente de la vida y tiene un trabajo diferente al que hace uno, entonces es como que es un embudo que caemos todos acá adentro y tratamos de pasarla lo mejor posible. Es algo muy lindo, algo muy loco. Ser bombero solamente lo puede llegar a entender el que es o el que tiene un amigo que es bombero que alguna vez le contó lo que es el cuartel. Un día de acá en el cuartel estás tomando mate, 5 o 6, nos reímos, sonó el teléfono, una emergencia de estar tomando mate y haciendo chiste a vestirnos de bombero y estar trabajando con una persona accidentada o con un incendio de campo un incendio estructural que es un incendio de vivienda. Yo siempre digo que el bombero

es uno, pero en ejemplo en la casa de uno a las tres de la mañana suena la sirena, suena el handy primero, y ahí son bomberos todos. Mi hija abre la puerta, mi señora abre el garaje, me pone la bicicleta o el auto o lo que sea, entonces el que sale es uno, pero en nuestras casas todos somos bomberos.

-¿Se estiló en algún momento venir a dormir al cuartel de quedarse por ejemplo la guardia que tiene que quedarse se queda acá acuartelado?

No, hemos estado acuartelados por horas pero de hacer noche no. Cuando éramos nosotros muy jóvenes si veníamos a dormir, veníamos a dormir la siesta en verano para agarrar una salida, eso sí, pero de estar acuartelado así por toda la guardia no. Si hemos estado un par de horas acuartelados, y por una supuesta emergencia por que por ahí hay un disturbio, algo y hemos venido al cuartel a esperar la orden de salida sí, pero estar durmiendo en el cuartel no.

-Urbano, ¿qué fue lo más lindo que viviste en estos 30 años seguramente bueno todas las experiencias que me contaste, la contás muy apasionadamente y lo viviste lo disfrutaste, pero que fue lo mejor que disfrutaste y vivistes al máximo?

Lo mejor de todo…(piensa) Y lo mejor de todo, era el reconocimiento de la gente que eso no tiene precio en la calle te saludan en un desfile, lo más lindo que tenemos cuando desfilamos para ir a aniversario de Laprida, ahí toda la gente aplaude es hermoso, la verdad que es algo que no tiene precio.

-Se Sienten un poquito que devuelve la gente el calor de todo lo que ustedes están dando todos los días.

Sí, igualmente, bueno hoy con las redes sociales después de una intervención los mensajes que se ven son muy lindos, entonces eso es lindo. Y Bombero da una experiencia de vida muy linda, conoces personas, conoces lugares, cuando uno viaja a capacitarse porque hay que viajar para para capacitarse, a reuniones de la región, reuniones de la federativa que son viajes donde uno conoce gente casi igual que uno, pero en otra ciudad, entonces ese reconocimiento y uno cambia teléfono después y queda una amistad por bombero, que después va a quedar, pero el bombero fue el que unió la amistad con esa persona que la viste justamente en una reunión o en una capacitación.

 -¿En qué año te designan Segundo jefe y cómo lo tomaste?

En el año 2016 se fueron los jefes que estaban anteriores, Marcelo Beltrán el Jefe y Juan Carlos Río el Segundo Jefe. Ellos se van en marzo del 16 y nosotros entramos con Carlos Aguado, que hoy es Comandante y el jefe actual, yo era subcomandante. La comisión nos designó a nosotros como jefatura, como segundo jefe y yo estuve hasta el año pasado, casi, casi, ocho años de segundo jefe con Carlitos que hoy Carlitos sigue, el jefe actual.

-Cómo se vive este Día del Bombero como hoy 2 de junio?

La verdad que el 2 de junio para nosotros es como si fuese nuestro cumpleaños. Uno lo vive a pleno, a pleno porque arrancamos a la mañana con el chocolate y el toque sirena, que el toque sirena es muy emblemático, es algo que uno tiene el oído casi medio preparado para escuchar la sirena, y ya te digo pues es como un cumpleaños, es muy lindo… Es muy lindo este día, estamos todos juntos, tenemos una fiesta y un acto donde hay ascenso, donde hay reconocimiento, donde hay esta el saludo de mucha gente que siempre se acuerdan pero ese día del día bombero es fantástico, y uno de los mejores días de mi vida que tenemos.

-Feliz día Urbano y muchas gracias…

Gracias a vos Fede, y quiero darle un agradecimiento muy especial a mi señora Vanina y mis hijas Maite y Lola, mi pilar fundamental mi familia, que siempre me banco y banca, y me dieron todo su apoyo siempre. Y un muy Feliz día a todos mis camaradas!!

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Por Federico Castro.